Hoy nos sentimos alegres, nos reunimos junto a nuestros estudiantes, quienes culminan el proceso de Catequesis Familiar de Iniciación a la Vida Eucarística, tan esperado.
Esta celebración es el punto de partida para seguir convocados a celebrar la Eucaristía, domingo a domingo, para crecer como cristianos. Sabemos también, que para ello necesitan del ejemplo y estímulo de sus padres y familiares.